La reindustrialización inteligente de Europa

Europa ha redescubierto la necesidad de la industria para alcanzar la autonomía estratégica. La base económica y social que históricamente ha construido Europa es, precisamente, su industria. Tras décadas de deslocalización y dependencia externa, la geopolítica ha devuelto al primer plano la urgencia de fabricar, innovar y defender con empresas, mano de obra y productos dentro de nuestras propias fronteras.
En este nuevo ciclo, iniciado a marchas forzadas, el sector del metal vuelve a alzarse como eje estratégico de la política industrial europea. La reindustrialización del continente no solo es una prioridad, sino un objetivo imprescindible ante lo que vendrá: desde la paz aún lejana en el este de Europa hasta el posible rearme de Rusia. Ha de ser una reindustrialización inteligente, que apueste por sectores dinámicos y garantice la competitividad de las factorías europeas.